(Declaración del Ministro de Relaciones Exteriores MOTEGI Toshimitsu)
Hace diez años, el 11 de marzo, un desastre con una escala sin precedentes causó estragos en Japón. El Gran Terremoto del Este y el tsunami, se cobraron más de 20.000 vidas y todavía estamos lidiando con las secuelas del accidente de la Central Fukushima Daiichi de TEPCO. Mientras conmemoramos una década del desastre, rezo una vez más por el descanso de las almas de las víctimas y extiendo mi más sentido pésame a sus familiares.